¿Nunca os ha pasado que os despertáis de muy buen humor? ¿Que empezáis el día bailando y cantando? ¿O riendo? Pues eso mismo me ha pasado hoy a mi. No sé si era porque había dormido bien o porque de verdad mi vida está yendo a mejor.
Llevaba unas semanas algo decaída y estos últimos días he estado realmente mal, pero hoy todo está cambiando. Tengo ganas de cambiar cosas en mi vida. Me veo más feliz, más positiva e incluso más sexy (lo digo en serio jajaja).
Después de muchas cosas he aprendido que un clavo no saca otro clavo. Que si quieres quitarlo tendrás que hacerlo tú mismo, para que después todo vaya como debe de ser. Tenemos que superar nuestros problemas nosotros mismos, podemos pedir consejo pero siempre seremos nosotros los que decidamos que hacer. De hecho, es nuestra vida y tenemos que vivirla a nuestro gusto, tanto con aciertos como con errores que nos harán aprender y llevarnos por un camino mejor.
También me he dado cuenta de quienes se preocupan por mi, quienes quieren verme feliz y quienes pueden soportar mis tonterías. A cada uno de ellos les doy mil gracias, tanto por felicitarme como por regañarme.
Y por acabar, hoy he leído una frase que, por desgracia, tiene mucha razón y me he identificado mucho por lo que me ha pasado días atrás:
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